11 lugares que ver en Lagos en 1 día, en el Algarve de Portugal.

Lagos es una de las ciudades más interesantes que ver en el Algarve, además de ser el lugar perfecto para explorar el oeste de esta región portuguesa. Nosotros nos alojamos cuatro noches en esta ciudad costera. Desde aquí pudimos visitar algunos lugares tan interesantes como el Cabo de San Vicente o las playas de la Ruta de los 7 Valles Colgantes.

Sin embargo, hay que reservar una jornada para disfrutar de los lugares más importantes que ver en Lagos, una ciudad que ha sido ocupada a lo largo de su historia por cartagineses, romanos, musulmanes y cristianos. Y no solo hay que recorrer su centro histórico, si no también la franja litoral más cercana a la ciudad. Especialmente, la maravillosa Ponta da Piedade, de la que enseguida os hablaré.

DÓNDE DORMIR EN LAGOS.

HOTEL VILA GALÉ LAGOS. Este hotel-resort es una maravilla y además está situado a solo cinco minutos a pie de la playa (Praia Media) y a veinte de la Marina de Lagos, pero en una zona muy tranquila. Las habitaciones son amplias y cómodas. El hotel incluye piscinas exteriores e interiores, campos de tenis y golf (pich and put) o un circuito de spa.

Una buena idea es alojarse en régimen de media pensión, para tener la cenas en el hotel.  Las comidas son muy variadas y de muy buena calidad y se sirven en modo buffet libre. Otra ventaja es que al no estar exactamente en el centro, dispondréis de sitio de sobra para aparcar el coche gratuitamente.

QUÉ VER EN LAGOS EN 1 DÍA.

1. EXCURSIÓN POR MAR A PONTA PIEDADE

Ponta da Piedade es de aquellos lugares que justifica, por si solo, la visita de una ciudad o lugar. Sin duda alguna, este maravilloso cabo erosionado por el viento y la furia del mar a lo largo de los siglos, es el lugar más bello que ver en Lagos.

Nosotros hicimos esta visita por mar, a bordo de una  embarcación, y fue uno de los mejores momentos del viaje al Algarve. Nos quedamos con muchas ganas de hacer este tour en kayak por Ponta Piedade, porque al viajar con un bebé, se nos complicaba mucho.

Este cabo esta formado por piedra caliza erosionada, que da lugar a multitud de arcos naturales y cuevas escondidas entre acantilados. Un espectáculo visual maravilloso que debe ser disfrutar tanto desde el mar como desde lo alto de los acantilados.

Para visitar Ponta Piedade desde el mar no hay otra forma que contratar la excursión. Nosotros hicimos el tour que os he comentado y quedamos muy satisfechos.

Las embarcaciones parten cada mañana desde la Marina de Lagos (un fenomenal puerto deportivo). Al cabo de unos minutos, cuando la embarcación llega a Ponta da Piedade (el cabo se localiza unos 4 kilómetros al norte de la ciudad) se cambia de embarcación. Gracias a pequeñas barcas pesqueras y en grupos reducidos, descubriremos los mil y un escondites que cobijan Ponta da Piedade. Una maravilla cuya descripción no haría justicia a lo que nuestro ojos disfrutan.

En este artículo os hablamos específicamente de cómo visitar Ponta Piedade en Lagos.

Al día siguiente, regresamos a Ponta da Piedade, pero esta vez para disfrutarla desde lo alto de los acantilados (luego os cuento).

2. MERCADO DE LAGOS

Tras regresar a puerto, nos disponemos a visitar el centro histórico de la ciudad. Hemos diseñado una itinerario que permite visitar lo más importante que ver en Lagos en unas tres horas, incluyendo un descanso para el almuerzo. Al fin y al cabo, el centro histórico de Lagos es bastante compacto.

Empezamos echando un vistazo al Mercado de Lagos, que se alza en un edificio de blanco impoluto frente a la Marina de Lagos. La verdad es que nos han dicho que a primera hora de la mañana bulle de actividad, pero casi a la una del mediodía hay aquí poco ambiente.

3. IGLESIA DE SAN SEBASTIÁN

Detrás del Mercado Municipal, subiendo una cuesta, nos encontramos con la iglesia de San Sebastián, que sobre el papel es una de las más importantes que ver en Lagos. Sin embargo, encontramos este templo de fachada neoclásica cerrado. Un cartel pone que a las cinco de la tarde hay misa, pero para entonces, nosotros ya estaremos disfrutando de algunas de las mejores playas de Lagos. Una pena, porque queríamos visitar la Capilla de los Huesos, formada por miles de huesos.

4. PLAZA DEL INFANTE DOM HENRIQUE. IGLESIA DE SANTA MARÍA Y MERCADO DE LOS ESCLAVOS.

Buscamos ahora Rua dos Ferreiros, que corre paralela a la Ribeira de Bensafrim (donde está la Marina de Lagos). Cambiando varias veces de nombre, esta vía nos lleva en unos pocos minutos a las más bella plaza que ver en Lagos, la Plaza del Infante Dom Henrique.

En esta plaza encontramos algunos de los monumentos más relevantes de Lagos (ahora os comento algunos). En uno de los lados se alza la estatua del infante Dom Enrique (hijo del Rey Juan I) que ha pasado a la historia con el sobrenombre de El Navegante (en realidad no fue conocido de esta manera hasta el siglo XIX). Fue uno de los grandes hombres de la Era de los Descubrimientos, cuando entre los siglos XV y XVI, el poder naval luso convirtió Portugal en una verdadera potencia europea.

5. IGLESIA DE SANTA MARÍA

El edificio más importante de la plaza es la iglesia de Santa María. Lo que vemos en la actualidad es la remodelación llevada a término durante el siglo XIX, después que la original del XIV y XV fuera pasto de las llamas. Por desgracia tampoco podemos visitar su interior porque está cerrada.

6. MERCADO DE LOS ESCLAVOS.

Sí que está abierto el edificio que queda justo al otro lado, en la misma Plaza del Infante Dom Enrique. No solo se trata de uno de las construcciones con más historia que ver en Lagos, si no que nos lleva directamente a lo más negro de la historia de la ciudad. Esta bonita construcción de dos pisos, con una logía que podía parecer incluso italianizante en la planta baja, desempeño las funciones de Mercado de Esclavos, ni más ni menos.

Según parece, fue en 1444 cuando los primeros esclavos procedentes de África llegaron a Lagos, por lo visto desde Mauritania, donde el Infante Henrique había establecido un puerto comercial. Durante unos 10 años, la pujante industria del esclavismo trajo a unos 800 esclavos hasta la población de Lagos, ciudad que se convirtió en el primer mercado africano de Europa.

En la actualidad, el Mercado de los Esclavos alberga un museo que ofrece al visitante la perspectiva sobre acerca aquellos infaustos años.

7. IGLESIA DE SAN ANTONIO

Subimos por Rua Henrique Correia da Silva para llegar, en dos minutos, a la que es la más bella de las iglesias que ver en Lagos. Se trata de la iglesia de San Antonio, el santo fallecido en Padova pero que muchas fuentes estiman portugués.

Aunque es de pago (muy barata) os aseguro que su visita merece la pena, por mucho que su austera fachada no permita pensar lo que hay en el interior. Y por más que no se permita fotografiar, por cierto.

Este templo, que debió ser reconstruido después de que el terremoto de 1755 lo asolara, es una maravilla del barroco. Es decir, lo que vais a ver aquí es mucho dorado y muchos angelitos, como corresponde a este tipo de templos. Las pinturas de los laterales muestran los milagros de San Antonio. Y la parte baja, está ornamentada con los clásicos azulejos portugueses que ya pudimos conocer al visitar Oporto o Lisboa.

8. CASTILLO DE LOS GOBERNADORES, PUERTA DE SAN GONÇALO Y MURALLAS

Buscamos nuevamente el paseo a orillas de la Ribeira de Bensafrim para encontrarnos lo que queda de algunas construcciones medievales. Por ejemplo en Castillo de los Gobernadores, que sucumbió al citado terremoto.

Junto a lo que queda de castillo encontramos las antiguas murallas de Lagos y, en realidad, la puerta más conservada de todas y que es conocida como Puerta de San Gonçalo. Lo cierto es que por Lagos han pasado distintas civilizaciones a lo largo de la historia y casi todas han dejado su poso en esta muralla. Aunque el origen parece ser romano, los árabes la remodelaron y lo que ha llegado a nuestros días corresponde a la reconstrucción cristiana del XIV. La cuestión es que esta Puerta de San Gonçalvo permite regresar a la ciudad intramuros, una maraña de calles empedradas y peatonales, muchas de ellas.

9. FUERTE PONTA DA BANDEIRA

Sin embargo, antes de entrar por la Puerta de San Gonçalo (y buscar algún lugar donde comer) nos fijamos en el pequeño fuerte que queda justo enfrente de la muralla. Se trata del Fuerte Ponta da Bandeira.

Esta pequeña construcción defensiva es de finales del XVII. Con sus garitas en las esquinas, su foso perimetral y su puente levadizo, la verdad es que da bastante el pego, aunque se trate de una fortificación más bien pequeña.

10. LAS MEJORES PLAYAS QUE VER EN LAGOS

Entre los lugares que hay que visitar en Lagos, sus maravillosas playas ocupan un lugar muy importante en la mayoría de viajeros que hasta aquí se acercan. No es de extrañar, la linea costera que une la ciudad antigua con Ponta da Piedade, está jalonada por media docena o más de playas, a cual más espectacular.

Nosotros visitamos varias de ellas, aunque solamente nos bañamos en alguna. Por varios motivos. El primero es que acostumbrados a las aguas del Mediterráneo, el Atlántico nos pareció helado. Pero el motivo principal es que al viajar con Iris, que apenas tiene 9 meses, no nos pudimos dar el gustazo de tostarnos al sol del Algarve, de manera que visitábamos cada playa durante un ratito, buscábamos los mejores miradores, quizá chapoteábamos un poco en la orilla y nos dirigíamos a la siguiente playa.

Comentar que para ir visitando las mejores playas que ver en Lagos, en algunas ocasiones se puede ir pasando de una a otra siguiendo la línea costera o gracias a cuevas artificiales abiertas en los mismos acantilados. Sin embargo, en otras ocasiones, debíamos subir nuevamente a la carretera (que pasa al menos, medio centenar de metros por encima de la playa) para ir a buscar la siguiente. En cualquier caso, las mejores playas que ver en Lagos las podéis encontrar en la línea costera que empieza a 100 metros del fuerte Ponta da Bandeira. Allí encontraréis la maravillosa Praia dos Estudiantes, a la que se accede desde un desvío que se toma desde la Avenida dos Descubrimientos. Estas fueron las playas que más nos gustaron en Lagos.

PRAIA DOS ESTUDIANTES

La de más fácil acceso, porque es la más cercana al centro de Lagos, como digo, a solo un centenar de metros del fuerte de Ponta Bandeira. Queda situada entre acantilados, algo que resulta bastante habitual en estas latitudes y se conecta con la playa anterior y posterior mediante sendos túneles excavados en la misma roca. La primera es Praia Batata; la segunda, no sé tiene nombre o se considera continuación de Praia dos Estudiantes, pero lo curioso es el arco existente que une tierra firme con uno de los peñascos.

PRAIA DO PINHAO

Un poco más al oeste, encontramos Praia do Pinhao. Como todas las que iremos viendo, se encuentra entre acantilados, dispone de doradas y finísimas arenas y se pueden disfrutar tanto desde abajo (lógico), como desde los miradores situados en lo alto de los acantilados.

Para acceder a esta playa, deberéis bajar por unas escaleras. No hay pérdida posible. Comentar que esta playa son en realidad dos. La segunda, que está a continuación, es algo más grande, pero de idénticas características.

PRAIA DONA ANA

Seguimos avanzando en dirección sur, donde está Ponta da Piedade, para encontrarnos con otra de las mejores playas que ver en Lagos. La Praia de Dona Ana. Más acantilados de color ocre y más arena dorada. Y ese color azul-verdoso tan espectacular que vamos encontrando en cada una de las playas.

Para llegar hasta Praia Dona Ana debéis bajar por unas escaleras. En esta playa hay algunos servicios, como un chiringuito y el alquiler de tumbonas.

PRAIA DO CAMILO.

Otra de las playas imprescindibles, bastante cerca ya de Ponta da Piedade. Encontraréis un desvío a mano izquierda bien indicado, al recorrer Estrada de Ponta da Piedade, que es la vía que llega hasta el cabo. Isa se quedó en el precioso chiringuito que queda a medio camino del acantilado, mientras Marc y yo bajamos las escaleras que llegan hasta Praia do Camilo para constatar que las aguas del Atlántico son mucho más frías que las del Mediterráneo.

Comentar que esta Praia do Camilo son en realidad dos, ya que desde la primera se accede a la segunda, que queda al norte de la primera. Podéis acceder a este segundo tramo desde la arena o por un túnel excavado en el acantilado.

11. PONTA DA PIEDADE DESDE LO ALTO

Ya os he comentado que Ponta da Piedade es el lugar más espectacular que ver en Lagos. Aunque ya la habíamos explorado desde el mar, al día siguiente regresamos para acercarnos a lo alto de los acantilados.

Hay un pequeño parking, justo enfrente del faro de Ponta da Piedade, que intuyo que en agosto se debe llenar enseguida. Pero nosotros no tuvimos problemas para aparcar, disfrutar de la vista desde lo alto de los acantilados e incluso bajar por las escaleras que te acercan hasta una de las cuevas existentes, ya al nivel del mar.

La verdad es que Ponta da Piedade convierte Lagos es uno de los lugares imprescindibles que ver en Algarve. Solo por este motivo ya merecería la pena visitar esta ciudad que, sin embargo, merece la pena más allá de este precioso espectáculo que es Ponta da Piedade.