
Hacía ya algún tiempo que deseaba escribir este artículo sobre los 10 mejores mosaicos bizantinos.
De hecho, me esperaba a visitar la Basílica Eufrasiana de Porec, algo que hemos hecho este año, pues deseaba incluir su maravilloso ábside en esta lista.
Como todos los artículos de este tipo que hemos publicado en este blog, este lista de mejores mosaicos bizantinos, es puramente personal, basado en los lugares que hemos tenido la oportunidad de conocer y, quede claro, no académico, pues al fin y al cabo, este es un blog de viajes.
BREVE HISTORIA DE LOS MOSAICOS BIZANTINOS
El arte bizantino se extiende, más o menos, entre los siglos IV y XV. Aunque formalmente se podría hablar de entre los años 313 y 1453, que es el de la caída del Imperio Bizantino, lo cierto es su influencia duró mucho más tiempo.
En este sentido, una de las formas de arte más típicamente bizantina fue el de los mosaicos. Unos mosaicos bizantinos que tienen su origen, claro está, en los estilos helenístico y romano que precedieron al advenimiento del arte bizantino.
Si bien en un principio, los mosaicos bizantinos se realizaban en pequeñas teselas de piedra para ornamentar los suelos (o en ocasiones, las paredes) de palacios y templos, con el tiempo pasaron a elaborarse también con teselas de vidrio al que se añadía pan de oro.
En esta lista de los 10 mejores mosaicos bizantinos de la historia vamos a señalar, únicamente, este segundo tipo se mosaicos. Unos mosaicos bizantinos que ornamentaron todo tipo de templos cristianos, pero también palacios y hasta mezquitas.
Esto último fue debido a la exportación de artesanos de origen bizantino hasta nuevos centros de poder, como la Damasco Omeya (los mosaicos de la Mezquita Omeya) o la Sicilia normanda.
Algunos historiadores dividen la historia del arte bizantino en tres periodos:
ARTE BIZANTINO DEL PERIODO TEMPRANO (c. 330-750)
Encontramos maravillosos ejemplos de mosaicos bizantinos en Roma (Santa Constanza, Santa Pudenziana y Santa María Mayor), Porec (Basílica Eufrasiana), Rávena (Basílica de San Vital o la Basílica de San Apolinar Nuevo por citar dos de los muchos ejemplos) o Tesalónica (Osios David, San Demetrio y la Rotonda).
ARTE BIZANTINO DEL PERIODO MEDIO (c. 850-1204)
La primera parte, de 867 a 1056, a veces conocido como del Renacimiento macedonio. Algunos ejemplos los encontramos en Estambul (Santa Sofía), Grecia (Hosios Loukas, Dafni y Nea Moni de Quíos), Venecia (San Marcos y Catedral de Torcello) o Sicilia (catedrales de Cefalú y Monreale, y Capilla Palatina de Palermo).
LA ÉPOCA ICONOCLASTA
Entre los periodos temprano y medio, encontramos las Controversias Iconoclastas, que tienen su punto de inflexión cuando el Emperador León III prohibió la creación de imágenes religiosas e incluso promovió la destrucción de las existentes.
Durante aquel nefasto periodo, algunos de los mejores mosaicos bizantinos de la historia se perdieron para siempre, incluyendo los de Santa Sofía en Estambul.
ARTE BIZANTINO DEL PERIODO TARDÍO (c. 1261-1453)
Muchas de las iglesias de Roma fueron ornamentadas con mosaicos de estilo bizantino, durante este periodo.
ARTE BIZANTINO MÁS ALLÁ DEL IMPERIO BIZANTINO
Como dije, poco a poco los artesanos bizantinos fueron siendo cada vez más demandados más allá de la propia influencia política bizantina. De hecho, incluso tras la caída del imperio bizantino (1453), podemos encontrar ejemplos de arte bizantino tardío.
En Roma, por ejemplo, son decenas los ejemplos de arte bizantino creados cuando la ciudad ya no formaba parte del Imperio Bizantino. De esta manera, no es de extrañar que algunos de los mejores ejemplos de mosaicos bizantinos de la historia los encontremos allí.
A los tempranos ejemplos citados de Santa Constanza, Santa Pudenziana y Santa María Mayor, habría que añadir, por ejemplo, los más tardíos de Santa María Trastevere o San Clemente (ábside del s. XII). El ábside de Santa María la Mayor es también del siglo XII.
Arte Bizantino e Islámico. Tikal Ediciones. Si queréis ampliar información acerca del arte bizantino (e islámico), este libro supone una fuente de información inagotable, amena y fácil de comprender para el lector no avanzado en la temática. Muy bien documentado, la obra repasa los distintos periodos del arte bizantino, con una gran cantidad de fotografías que facilitan la comprensión.
10 DE LOS MEJORES EJEMPLOS DE MOSAICOS BIZANTINOS DE LA HISTORIA
Sin más, os dejo con nuestra lista de 10 de los mejores mosaicos bizantinos de la historia. Todos ellos están incluidos en la lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad.
1. IGLESIA SANTA MARÍA LA MAYOR DE ROMA
Podría haber incluido a varias de las más importantes iglesias de Roma en esta lista de los mejores mosaicos bizantinos, porque la profusión de este arte en Roma fue bastante amplio a lo largo de varios siglos.
Sin embargo, he incluido Santa María la Mayor, porque sus mosaicos bizantinos abarcan casi 8 siglos.
Desde el siglo V que viene decorándose Santa María la Mayor con mosaicos de estilo bizantino. Sin embargo, dado que los bizantinos no reconquistaron Roma hasta el año 535-554 d.C., con las Guerras Góticas, para integrar la ciudad como parte del Exarcado de Rávena, hay quien, más estrictamente, se habla de mosaicos prebizantinos.
En este sentido, estos mosaicos suponen una de las representaciones más antiguas de la Virgen María, algo consecuente al Concilio Ecuménico de Éfeso del año 431, cuando la Virgen María pasó a ser glorificada como Portadora de Dios.
Unas representaciones de la Virgen, que servirían de modelo para otras muchas durante los siglos siguientes.
La nave de Santa María la Mayor estaba cubierta de mosaicos que representaban historias del Antiguo Testamento, como el célebre momento en que Moisés golpea las aguas del Mar Rojo, para que estas se abran.
En la cabecera de la nave, encontramos el mosaico del arco triunfal, que también representa diferentes momentos de Cristo y la Virgen María, que es, al fin y al cabo, a quien está dedicada la iglesia.
En uno de los paneles del arco triunfal, es mostrada la Virgen coronada y vestida al estilo de una emperatriz romana; sin embargo, la temática es variada, incluyendo la entronización de Cristo o escenas de la Adoración de los Magos.
Bastante posterior es el mosaico del ábside, ya de finales del siglo XIII y del que se conocer su autor, el pintor y mosaicista Jacopo Torriti, que también trabajó en el ábside de San Juan de Letrán. La obra representa la Coronación de la Virgen.
2. BASÍLICA SANTA SOFÍA DE ESTAMBUL
Probablemente sea la Basílica de Santa Sofía de Estambul, la gran obra arquitectónica del arte bizantino.
Inaugurada en 537, en tiempos de Justiniano y bajo el diseño y dirección de Antemio de Tralles e Isidoro de Mileto, Santa Sofía fue la catedral ortodoxa bizantina de rito oriental de Constantinopla.
Y no solo es: también fue la iglesia más grande de la Cristiandad durante aproximadamente un milenio.
Pero en este artículo no os hablaremos de arquitectura, si no de los mejores mosaicos bizantinos de la historia.
En este sentido, muchos de los mosaicos creados durante el reinado de Justino II (segunda mitad del siglo VI) se perdieron durante la segunda mitad del siglo VI, de manera que la mayoría de los que han llegado a nuestros días, son de los siglos X a XII.
Eso sí, todo ello pasado por el matiz de la recuperación y la restauración, después de que durante los años en que Santa Sofía fue convertida en mezquita, la mayoría de mosaicos cristianos fueran cubiertos con yeso.
Algunos de los mosaicos más célebres son el de la Puerta Imperial, situado en el tímpano de la puerta, que representa al Emperador inclinando ante Cristo Pantocrator, o los mosaicos del ábside, que representa a la Virgen María sosteniendo al Niño Jesús.
No menos célebre es el mosaico de la Deesis, quizá el más conocido de Santa Sofía, y que ya es del siglo XIII y que parece anticipar ya el gótico. En este mosaico, la Virgen María y Juan Bautista secundan a Cristo Pantocrátor, al que suplican por la humanidad.
Destacar también el mosaico de Comneno, donde el Emperador Juan II Comneno y su esposa Irene de Hungría, están representados junto a la Virgen María que sostiene al Niño Jesús.
3. IGLESIA DE SAN VITAL DE RÁVENA
No es de extrañar que algunos de los mejores mosaicos bizantinos de la historia los encontremos en Rávena, pues la ciudad se convirtió en capital de las regiones occidentales del Imperio Bizantino.
Podía haber escogido para esta lista cualquier de los ocho monumentos que ver en Rávena incluidos en la lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad, porque todos disponen de mosaicos bizantinos preciosos. Pero quizá sea San Vital el más espléndido de todos.
De hecho, tras la llegada de los bizantinos, San Vital se convirtió en el templo oficial para el gobernador de la región occidental del Imperio.
Los mosaicos bizantinos de San Vital están considerados entre los de más calidad del periodo temprano del arte bizantino. Especial importancia tienen los mosaicos de Justiniano y Teodora, ubicados en el presbiterio, del siglo VI, auténtica obra maestra del arte bizantino temprano.
No menos importantes son los mosaicos de la bóveda, donde encontramos a un Cristo helenizado, que ofrece la corona del martirio a San Vital, mientras recibe la maqueta del templo de manos del obispo Ecclesio.
4. BASÍLICA EUFRASIANA DE POREC
Los de la Basílica Eufrasiana de Porec suponen uno de los mejores mosaicos bizantinos de época temprana que han llegado a nuestros días.
La iglesia se alza sobre una primitiva basílica del siglo IV, dedicada a San Mauro de Parentium. Sin embargo, la Basílica Eufrasiana de Porec que visitaremos corresponde a la época del Obispo Eufrasiano (edificada a partir del año 553).
De hecho, los mismos mosaicos bizantinos, que ocupan el presbiterio del templo, son del siglo VI.
De arriba abajo: en el arco triunfal sobre el ábside, Cristo es representado sosteniendo un libro junto a los apóstoles, seis a cada lado.
Por debajo, ocupando la bóveda, la Virgen María es representando con el Niño, algo poco habitual en las basílicas paleocristianas. La parte interna del arco interior, está decorado con medallones que representan el Cordero de Dios y doce mártires.
Además de varios ángeles flanqueando a la virgen, aquí encontramos la célebre imagen del obispo Eufrasio, sosteniendo la maqueta de la iglesia, además de San Mauro. Más abajo, separado por ventanales, dos maravillosos mosaicos con escenas de la Anunciación y la Visitación.
5. CAPILLA PALATINA DEL PALACIO NORMANDO DE SICILIA
La Capilla Palatina de Palermo fue construida tras la conquista normanda de Sicilia por parte de Roger I, en el último tercio del siglo XII, aunque lo que vemos en la actualidad es obra, sobre todo, de Roger II.
El resultado es una mezcla de estilos arquitectónicos, incluyendo el bizantino, el normando y hasta el fatimí. Es un ejemplo, pues, de cómo los artesanos bizantinos trabajaron fuera de las fronteras del Imperio Bizantino.
Se trata de uno de los mejores mosaicos bizantinos del siglo XII (estarían terminados sobre el 1143).
El conjunto lo cubre casi todo: techo, tambor, cúpula, muros, crucero… No faltan los Tres Grandes Padres de la Iglesia Ortodoxa: San Gregorio, San Basilio y San Juan Crisóstomo.
6. CATEDRAL DE CEFALÚ
La Catedral de Cefalú también corresponde a la época normanda de Sicilia, pues fue erigida a partir de 1131, en época de Roger II.
Aunque parece que inicialmente estaba previsto decorar toda la iglesia, finalmente solo se completó el presbiterio. En este desempeño trabajaron los artesanos bizantinos llegados desde Constantinopla.
El ábside está dominado por el busto de Cristo Pantocrator, bendiciendo con la mano derecha y portando el Evangelio de San Juan en la derecha.
Los mosaicos bizantinos también representan la Santísima Virgen María, flanqueada por cuatro arcángeles, así como los apóstoles y evangelistas. La importancia de este conjunto es tal, que algunos autores lo consideran como el mejor mosaico bizantino de Italia.
7. CATEDREAL DE MONREALE
Algo posterior a la de Cefalú, la Catedral de Monreale data ya de la segunda mitad del siglo XII, en época de Guillermo II.
Los mosaicos bizantinos de la Catedral de Monreale cubren un área de unos 6.500 m². Además de representar distintas historias de la Biblia, incluyendo la del Arca de Noé y o la de Adán y Eva, la primera mirada se la lleva el Cristo Pantocrátor que domina el ábside.
Tampoco en Monreale faltan las imágenes de la Virgen y el Niño entronizados, flanqueados por arcángeles y apóstoles. Es decir, el programa iconográfico es similar al de Cefalú. En el arco absidial no faltan las representaciones de Guillermo II coronado por Cristo y el propio monarca ofreciendo la iglesia a la Virgen María.
Sin embargo, aquí sí que pudo completarse el conjunto de mosaicos, incluyendo los muros y la fachada interior, con un programa completísimo que incluye temas que van desde el Libro del Génesis hasta la Vid, Muerte y Resurrección de Cristo.
8. BASÍLICA DE SAN MARCOS DE VENECIA
Unánimemente considerada como otro de los grandes momentos del arte bizantino, la Basílica de San Marcos de Venecia fue construida a partir del año 1063, después de que la iglesia hasta entonces existente sucumbiera a un terrible incendio.
El programa decorativo, a base de mosaicos, es de lo más extenso, abarcado la práctica totalidad de cúpulas, presbiterio y muros, resultando obligado incluirlo en la lista de los mejores mosaicos bizantinos de la historia.
Probablemente el conjunto se ejecutó a partir de 1070, siendo obra de artesanos bizantinos que habrían llegado desde Constantinopla y que también trabajaron en la Catedral de Torcello.
La sinfonía dorada de San Marcos es total e incluye decenas de escenas del Antiguo y Nuevo Testamento, incluyendo algunas de tan célebres como el Paraíso, la Pasión de Cristo o varios milagros de Jesús.
También la vida de San Marcos está representada, en sendas capillas situadas a ambos lados del presbiterio.
El programa de mosaicos incluye la cúpula de los profetas (con un pantocrátor central, la Virgen con los trece profetas y los cuatro evangelistas), la cúpula de la Ascensión (Cristo rodeado de la Virgen y los doce apóstoles) y la cúpula del Pentecostés (la bajada del Espíritu Santo de los cielos).
9. BASÍLICA DE SANTA MARÍA ASUNTA DE TORCELLO
Localizada en una de las islas de la Laguna de Venecia, esta basílica llegó a desempeñar las funciones de catedral y es otro ejemplo que nos recuerda que los artistas bizantinos trabajaron más allá de las fronteras del propio Bizancio.
Como comentamos anteriormente, los mosaicistas llegaron de Constantinopla para trabajar en Torcello durante la segunda mitad del siglo XIII y luego ya se quedaron a ornamentar San Marcos de Venecia.
Los mosaicos de Torcello son los más antiguos de la región. En el ábside se representa a la Virgen Hodegetria sobre un grupo de santos.
Sin embargo, los más celebres son los que ornamentan la contrafachada, donde el programa la Crucifixión, el Descenso de Cristo a los infiernos y el Juicio Final.
10. MONASTERIO DE OSIOS LOUKÁS EN GRECIA
Varios de los mejores mosaicos bizantinos están en Grecia. Por ejemplo, en el Monasterios de Osios Loukás, que fue fundado en el siglo X por el santo Lucas Traumaturgo y donde se encuentra su tumba.
Aunque tanto histórica como arquitectónicamente el monasterio tiene relevancia, aquí nos fijaremos en la ornamentación. Y básicamente, en sus mosaicos bizantinos que están considerados como momento cumbre de lo que se conoce como Renacimiento Macedonio.
Con este último término se conoce la primera parte de periodo bizantino medio, entre los años 867 y 1056, cuando la dinastía macedonia gobernó el Imperio bizantino, tras suceder la dinastía amoria.
Un momento de especial florecimiento de la cultura bizantina tras el oscurantismo del periodo iconoclasta de los siglos VII a VIII.
En este sentido, el Katholikon (la iglesia principal) de Osios Loukás contiene el conjunto de mosaicos mejor conservado del Renacimiento macedonio. Nuestro favoritos son el Cristo sosteniendo el evangelio, situado en el nártex, y la escena de la Resurrección de Cristo.
También el mosaico de la Virgen con el Niño, del ábside, es bien bonito.
Estos son 10 de los mejore mosaicos bizantinos de la historia. Al menos, entre los que hemos podido conocer.